Víctor Barrera
Será durante la segunda semana del mes de noviembre cuando se discuta, y posiblemente se apruebe el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF), con lo cual se concluiría la aprobación total del Paquete Económico para el 2022.
De hacerlo así, esta legislatura estaría cumpliendo en tiempo y forma con lo establecido en la Constitución y no habría mayor trabajo para nuestros legisladores durante este año que el presentar sus propias iniciativas, basadas ya en los gastos a realizar por el gobierno federal.
La siguiente iniciativa a discutir, y que posiblemente empezará a realizarse hasta el segundo periodo de sesiones, es decir a partir del 1 de febrero del 2022 es la enviada por el Poder Ejecutivo en materia eléctrica.
Pero esta también habrá que discutirse con base en lo aprobado en el presupuesto de egresos, para saber si existen los suficientes recursos económicos, para iniciar la inversión en esta materia y que en el corto plazo la Comisión Federal de Electricidad (CFE), pueda cumplir con lo establecido en esta iniciativa que es generar el 54 por ciento de la energía eléctrica que necesita el país.
Esto implica establecer la ruta a seguir para que la CFE produzca energía a través de la utilización de mayores recursos no contaminantes.
Además se deberá establecer la manera en la cual se trabajará para ir aumentando la creación de esta energía que pasará del 37 por ciento que en este momento produce la CFE a lo ya establecido y que significará una inversión bastante alta.
Es este aspecto, el poder legislativo, tendrán que adecuar la partición del presupuesto de egresos para establecer esos recursos suficientes que permitan crear las nuevas plantas generadoras de la energía, desde los geotérmicas, que se basan en ir al interior del centro de la tierra y a través del calor que se genera en ese punto, sacar vapor suficiente para realizar la activación de la tecnología y crear luz eléctrica.
Debemos señalar que este tipo de plantas tiene ciertos riesgos, si no se establecen las tecnologías adecuadas que implique un control adecuado el vapor para evitar alguna explosión que pueda perjudicar la planta generadora y la zona donde se establezcan.
Otro elemento que echará mano la CFE para genera emergía eléctrica será el agua, a través de las presas ya existentes. Esto reducirá la inversión en este tipo de plantas, pero se tendrán que establecer algunas otras y para ello, a decir de Manuel Bartlett, director de la CFE, se está planeando utilizar las presas agrícolas algo que perjudicaría de manera importante a este sector, dando como resultado una menor producción de productos agropecuarios.
De acuerdo al Programa de Desarrollo del Sector Eléctrico Nacional 2020-2034 de la Secretaría de Energía, para el periodo que va del 2021 al 2024, la CFE tendrá un presupuesto importante con el objetivo de aumentar en 196 mega watts la capacidad de energía, sin embargo, esto será insuficiente en términos reales si se pretende dejar a un lado la utilización de la quema de fósiles, porque son altamente contaminantes.
Entonces, se necesitarán de cantidades importantes de recursos económicos, que no tiene el gobierno federal y que deberá buscar en el sector privado, sin embargo, ante la forma en la cual ha actuado el gobierno federal, la inversión de los privados será cada vez menor, mientras que no exista la garantía total que se respetaran sus inversiones y se les permitirá obtener ganancias importantes.
Mientras que no suceda esto, será el gobierno federal la principal fuente de inversión y para cubrir esto pasaran por lo menos unos años más, hay quienes señalan que será más de una década, para poder establecer la infraestructura suficiente que genere la energía eléctrica a través de procesos limpios y no contaminantes.
Esto siempre y cuando, de la parte fiscal, exista el suficiente apoyo para generar riqueza que atraiga a los inversionistas para establecer en nuestro país sus plantas productivas.
México se enfrenta a un reto importante re establecer la forma de generar energía eléctrica, sea a través de utilización de energía solar, y el eólica, para evitar seguir quemando fósiles o utilizar el agua destinada a los cultivos y para beber del ganado.
Entonces los legisladores deberán establecer un presupuesto de egresos, que realizara el gobierno federal, más equilibrado, sostenible para los sectores productivos y protector de los recursos naturales que permitan el cultivo y cosecha de alimentos, además de un desarrollo pecuario, acuícola y ganadero para cubrir las necesidades alimentarías de la gente en México.
