Documental Político
Emilio Trinidad
De uno y otro lado supuran pus. De uno y otro bando preparan dardos letales, estocadas que sus “estrategas”pretenden hundir en el corazón de una y otra, mientras ellas sacan sus mejores discursos para envolver al electorado, para engañarlo, para aparecer y parecer que por el “amor” al Estado de México, se sacrificarán durante seis años al frente del gobierno de la entidad, y sueltan frases en las que abunda la honradez, la ética, la moral pública y la famosa fórmula -que nunca funciona- para asegurar que tienen en sus manos la solución a los múltiples problemas que a su población aquejan.
Son Delfina Gómez y Alejandra Del Moral, dos mujeres que hacen sonar los tambores de guerra para denostar y descalificar sus trayectorias, sus orígenes manchados de abusos, de opacidad, de desvío de recursos, de excesos y abusos de autoridad.
A ambas las rodean personajes siniestros, hombres que se han hecho de fortunas incalculables y que no podrían mirar de frente la Renovación Moral de la Sociedad, que intentó impulsar el entonces candidato a la Presidencia Miguel de la Madrid.
Una y otra están dispuestas a vender su alma al diablo con tal de manchar sus respectivas honras, y no repararán hasta descarrilarse mutuamente, así sea gastando cientos de millones de pesos -de origen dudoso- con tal de obtener
el triunfo y sacarán trapitos al sol de morenistas y priistas con colas más largas que la línea del Ecuador. Hay quienes dicen que Horacio Duarte vació las arcas de la Aduana que dirigió para inyectar esos recursos en la campaña de la maestra, mientras que el propio Duarte prepara una bomba noticiosa para exhibir los turbios negocios y voracidad de ex colaboradores de Enrique Peña Nieto, que utilizaron sus cargos para ampliar sus ya obesas carteras.
Según algunos muy enterados, David López Gutiérrez, ex jefe de prensa del hoy ciudadano español, junto con otro prominente funcionario que día y noche veía al presidente Peña Nieto, hicieron jugosos negocios haciéndola de gestores para que diversos políticos cercanos a ellos, pudieran obtener Notarías en el Estado de México.
Fueron -de acuerdo a las voces que dicen tener pruebas de ello- diez Notarías las que ambos lograron y luego vendieron a todo aquel que les llegara al precio. De esta forma, por ejemplo, el ex gobernador de Guerrero, Héctor Astudillo, obtuvo una para obsequiarla a su hijo, no sin antes pagar por ella a estos dos ex servidores públicos, la cantidad de tres millones de pesos.
Esta información la tiene el oscuro, truculento y perverso Horacio Duarte -de uñas largas también-, que hará todo lo posible para que se anulen esas diez Notarías obtenidas y dadas de forma por demás irregular, y para que de paso y dado el escándalo, se diga y señale que los priistas mexiquenses son doctorados en corrupción.
Así comienzan las campañas en el Edomex y habrán de darse con todo, de forma inmisericorde, con tal de obtener el poder, el control y el presupuesto de la entidad más
codiciada por cualquier político, donde el gris gobernador Alfredo Del Mazo Maza, parece jugar para ambos bandos.
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