Víctor Barrera
Las dos semanas siguientes serán de importancia para el país, y esperemos que Andrés Manuel López Obrador no se le ocurra sacar otro “distractor” que desvié la vista a un tema tan importante como es donde se aplicaran los recursos que se generaran a partir del cobro de impuestos para crear el desarrollo económico que necesitamos para que a partir del 2022 podamos empezar a hablar de un verdadero crecimiento que cambie la calidad de vida de todos los mexicanos.
Durante las últimas semanas, los diputados federales al interior de cada una de las comisiones legislativas ordinarias existentes, se dedicaron a revisar el Presupuesto de Egresos que contiene el Paquete Económico para el 2022 y dar su punto de vista, de si es o no el suficiente para empezar a obtener ese desarrollo y crecimiento económico.
Esto nos hace pensar que ya hicieron los ajustes necesarios para priorizar las necesidades del país y con ello colocar un mayor número de recursos económicos en sectores que nos lleven a los niveles de crecimiento esperados, por encima del4 por ciento.
Debemos recordar que este gobierno mantiene su política de ahorro y austeridad, con el objetivo de mantener la estabilidad económica que mantenga al país dentro de la calificación suficiente para poder obtener, en caso de que sea necesario créditos de organismos internacionales para seguir fomentando el crecimiento económico.
Pero también se debe contar con ingresos propios, a través de la recaudación de impuestos, suficientes para que el país pueda empezar a utilizarlos a favor del desarrollo del país y el bienestar de la población.
Por lo tanto el gobierno federal, debe ya tener la estrategia para aplicar estos recursos en los sectores que serán los puntales del desarrollo y fortalecimiento económico del país y esperemos que estos estén encaminados a un desarrollo más importante del sector primario, el agropecuario, que produzca no solo los alimentos que nos permita ser un país autosuficiente en este rubro, sino que también existan esos excedentes que puedan ser exportados y comercializados para generar recursos a favor de un mayor desarrollo.
Cumpliendo con este sector, el secundario, que es el industrial y de transformación, deberá fortalecerse en el sentido de empezar a mirar hacia una población con un sistema educativo capaz de generar a los científicos y desarrolladores de tecnologías que nos lleven a aprovechar todas las ventajas que la naturaleza nos aporta en materiales e insumos, por lo tanto el sistema educativo, deberá desarrollarse en temas como el científico y tecnológico para no solo ofrecer mano de obra barata al mundo a través de manufactura, sino un gente capaz de aportar y acompañar al desarrollo de nuevas tecnologías y la ciencias para mejorar la calidad de vida, lo que traerá consigo un mejor sistema de salud, que llegue a todos los mexicanos.
Si nuestros legisladores priorizan estos dos sectores, entonces podemos contar un crecimiento económico que se reflejará de manera importante en el tercer sector, el de comercio, servicios y turismo, que se fortalecerá ante la capacidad de compra y gasto que los mexicanos tengamos a partir de tener más y mejores empleos y por supuesto salarios dignos.
Parece sencillo y esto no podría causar ningún problema si se priorizan las cosas en el orden que deben de ser, pero cuando se intenta seguir con ocurrencias anacrónicas, donde se pretende establecer nuevamente al Estado como un empresario y no un administrador, entonces los problemas surgen.
Esperemos que, a partir de este martes, que se inicia la discusión del Paquete de Egresos, nuestros legisladores tengan establecidas la prioridades del país, de la población y no solo las de un grupo político, porque entonces tardaremos aun mas para desarrollarnos con economía, que teniendo riquezas no sabemos como utilizarlas para el bien de nosotros y solo dependemos de lo que otras naciones hacen.
