De memoria
Carlos Ferreyra Carrasco
En la escala zoológica, los mexicanos apenas andamos en la categoría de primates, seres elementales que actúan por instintos y nunca por la razón.
El caso INE es buena muestra de la incomprensión de leyes y reglamentos para la vida en sociedad. Lo que ayer y a conveniencia de los que dicen estar cercanos a la izquierda política, al cambiar el poder cambian los intereses y, por tanto, las reglas.
Pero no hay un cambio legal, civilizado sino un cruce de insultos, advertencias y amenazas en vías de cumplimiento.
Veamos cómo opinan y resuelven la elección para gobernador en Guerrero. El aspirante, Félix Salgado Macedonio, hombre de tenebrosos antecedentes, tanto así que se muestra como padrino del Niño conocido por el vulgo como Chocoflán.
Es el menor de los vástagos del Peje y único con su pareja imperial Beatriz Gutiérrez Müller.
Las agarraderas de Félix alcanzan su cercanía con la dueña y el dueño de La Jornada, Carmen Lira y Carlos Payán. Fue director de la edición acapulqueña del actual boletín publicitario de Morena y portavoz personal de López Obrador.
Con todo su primitivismo a las espaldas, el aspirante sabe por dónde manejarse: seis meses de ingobernabilidad para que se convoque a nueva elección en la que ya tendrá participación total. No es impresión personal, sino que ya lo anunció en su más reciente mitin.
Pero hay otro detalle de tipo legal que sólo un experto podrá aclarar: la popularidad de Salgado ha sido arrasante. Son infinidad de mujeres mostrándole su apoyo y a eso ha recurrido el candidato moviendo el sentimiento regionalista.
Algo parecido a La Patria es primero sin ocultar su apariencia caciquil, su proclividad de macho violador en un estado donde todavía las mujeres consideran que “si no me pega, es que no me quiere”.
Con votación apabullante aún fuera de las boletas electorales, si el resultado le es positivo habrá que definir si en cierta parte de la ley se constriñe la participación a quienes digan los partidos. O si es un derecho ciudadano, constitucional para que todo el que aspire a cargo de elección popular tenga derecho a hacerlo.
Ya hubo un debate al respecto cuando Magcel quiso candidatearse… ¿Qué sucederá ahora? A Macedonio podrán hasta discutirle el bajo registro de su IQ como a su compadre pero igual, no le podrán negar esa cualidad animal para reaccionar cuando debe y en el momento adecuado.
El Planeta de los Simios ya está aquí…
