*Sí por México le conviene a los partidos, pero también a México, establece el ex secretario de Turismo
Por Pepe Alemán
El poderío de Morena y la falta de competitividad del PRI, PAN y PRD obligaron a que se consumara la alianza “Va por México” para buscar equilibrar el ejercicio de poder a nivel federal y “Sí por San Luis Potosí” en lo local para impedir que el partido del presidente Andrés Manuel López Obrador ocupe el palacio de gobierno, opinó Enrique Octavio de la Madrid Cordero, quien fue secretario de Turismo en el sexenio del priista Enrique Peña Nieto, director de Financiera Rural en el sexenio del panista Felipe Calderón Hinojosa y ex hijo del ex presidente de la República, Miguel de la Madrid Hurtado.
“Lo que importa es la gente, la política y lo que importa es adaptarse a tu realidad, hoy en día los partidos solos no son suficientemente competitivos para enfrentar la otra fuerza que sí es una fuerza muy poderosa”, expresó en entrevista en la capital potosina.
Cuestionado sobre la pérdida de identidad y extravío ideológico que pueden acusar los partidos coaligados que en el pasado reciente eran adversarios políticos, Enrique de la Madrid comparó la alianza entre PAN y PRI como los equipos de futbol América y al Guadalajara a los que a final de cuentas lo que los une es el amor al juego que practican.
Aunque admitió que históricamente han tenido muchas diferencias que incluso se mantienen, el objetivo de la alianza “Va por México” y la coalición “Sí por San Luis” es generar equilibrios en el país y consolidar un gobierno de coalición a la europea, “yo trabajé en un gobierno panista siendo del PRI, por lo menos en la parte económica creo que ya habido mucha identidad, vemos las cosas parecidas, ahí no habido muchas diferencias, y dónde han habido diferencias se mantienen, pero esas no son motivo de la coalición”, enfatizó.
Respecto si se mantendrá la fidelidad de la militancia ante los acuerdos tomados por las cúpulas empresariales y de los tres partidos nacionales coaligados, Enrique de la Madrid aseveró que si los mueve el interés por el equilibrio de poderes y por el avance de la economía, la afiliación de origen pasará a segundo término, además de que “es lo que más le conviene a cada uno de los partidos para subsistir y recuperar, de entrada es un proyecto de realismo y la otra porque es lo que le conviene a México (…) no es que te entregas a otro partido, formas parte de una coalición, a unos les tocó candidatos a las alcaldías y a otros para diputados, es una distribución de oportunidades”, apuntó.
