EL SOCAVÓN
Carlos García Grandos
A estas altura de la crírica situación que vivimos como nación en todos aspectos, no nos extraña que el Instituto Nacional Electoral, que preside Lorenzo Córdoba, tiene dos raseros al igual que el presidente López Obrador, debido a la toma de decisiones finales muy radicales que soprenden a propios y a extraños, que hace ennegrecer y complicar el panorama político para las elecciones intermedias de 2021.
Resulta que el INE que preside Lorenzo Córdova (a quien trae entre ceja y ceja) el mandatario Andrés López Obrador, le negaron los registros como partidos a a la organización México Libre y Redes Sociales Progresistas de Felipe Calderón y su esposa Margarita Zavala y al de Elba Esther Gordillo, respectivamente.
La decisión de darle para atrás a Calderón y seguidores se debió a que a que siete de los once consejeros rechazaron otorgarle la anuencia porque el 8.18% de los ingresos de dicha colectividad no tiene claro su origen, aunado a su dudoso proceso de integración. Por supuesto que la respuesta del expanista no se hizo esperar y llamó mentiroso a Córdoba Vianello agregó que no los detendrán, mientras que Margarita Zavala llamó absurda la decisión del INE.
Fuerza Social por México del senador morenista Pedro Haces tampoco tuvo acceso al registro, así como Otras organizaciones a las que se les neg´p
Las otras organizaciones que no tuvieron acceso a registrarse como partido fueron Súmate a Nostros del expanista Manuel Espino Barrientos; Fundación Alternativa de los expriistas César Augusto Santiago e Isidro Pastor.,
Absurdamente, a la organización Encuentro Solidario, (antes Partido Encuentro Social), partido rémora que perdiera su registro en los comicios de 2018 fue a la única que le dieron el aval para integrarse como instituto político.
Así pues, el Instituto Nacional Electoral al igual que López Obrador han demostrado que tienen dos raseros, el primero es a su arbitrio y dicen lo que creen y el otro que dan canonjías a quien les plazca.
Recordemos que el tabasqueño hizo su campaña mediática hace un mes a través del traidor y soplón Emilio Loyoza Austin para exhibir a priistas supuestamente atascándose de cantidades exorbitantes de dinero en unos videos, en los que no aparece nadie de los que ensartó el exdirector de Pemex; y en dos videos en los que aparece Pío López Obrador (hermano del mandatario) recibiendo millones de pesos de manos de David León, exfuncionario de la decepcionante 4t, pues el jefe del Ejecutivo dijo que ellos no “son corruptos” porque ellos recibieron “aportaciones del pueblo para el movimiento”. ¡Ah caray!
¡CORRUPCIÓN EN MACUSPANA, TABASCO!
Pese a las permanentes declaraciones del mandatario Andrés Manuel López Obrador, que ese gobierno no será recordado por corrupto (¿?), la realidad es otra ya que el jueves pasado el alcalde de Macuspana, Tabasco, casualmente tierra natal de López Obrador, Roberto Villalpando y su cabildo en medio de reclamos y acusaciones por corrupción, renunciaron a sus cargos, si leyó usted bien -apreciable- lector, ¡por corrupción!.
El presidente municipal y su cabildo están acusados por líderes de otros partidos de saqueadores de la hacienda pública municipal y de incumplimiento de promesas de campaña.
Pero en eso no terminó el severo problema ya que el Congreso de Tabasco, tomó cartas en el asunto y desapareció el viernes pasado al municipio de Macuspana, nombrando un Concejo Municipal encabezado por Mauro Winzig Negrin, de extracción priista así como dos conejales más, Diana Miranda White y María Guadalupe Blandin Gil.
Así pues, el municipio en donde vio la luz por primera ocasión López Obrador es centro de escándalo por el caso de ¡Corrupción!, por lo que hasta el Congreso tabasqueño tuvo que intervenir para desaparecer dicho ayuntamiento.
Esta es una afrenta para el presidente López Obrador debido a que su terruño (Macuspana) fue víctima de un acto de corrupción, que fue encabezado por Roberto Villalpando de Morena, partido en el poder y su “flamante” cuerpo edilicio, que demostraron que la honestidad no es para ellos, lo suyo, es la corrupción. ¿Qué tal?
Por cierto López Obrador, se trasladó el viernes pasado a Macuspana para controlarla información y darle seguimiento a este desfalco por 200 millones de pesos, inclusive la síndico… es esposa de Ramiro López Obrador, quien actualmente es subsecretario del gobierno tabasqueño.
Por supuesto que en sus declaraciones, López Obrador dirá que es un “pequeño” acto de corrupción por parte de unos morenistas, que no se asemeja ni tantito a los miles de millones que se llevaron en el decepcionante sexenio de Enrique Peña Nieto, agregará que los anteriores sí son corruptos”, pues los de la cada vez más decepcionante 4t si son “honrados”.
68 MIL PERSONAS “OFICIALES” HAN MUERTO POR EL COVID-19
Lamentablemente, las “cifras oficiales” del gobierno de López Obrador dan a 68 mil fallecidos hasta hoy por el Covi-19 en nuestro vapuleado país, aunque especialistas médicos y estudios de universidades de otras naciones, aseguran que los muertos pueden ser tres veces más de los que se indican.
Diariamente siguen perdiendo la vida más de 400 personas sin que la administración de López Obrador pueda aplanar la curva del coronavirus y conste que desde principios de mayo el macuspano dijo que “ya estaba domada la pandemia”, cuando la realidad es otra.
AVANZA LA MILITARIZACIÓN DEL PAÍS
Sigue avanzando la militarización de la cada vez más decepcionante, ineficiente e irresponsable cuarta transformación que dirige Andrés Manuel López Obrador con el despliegue del 31 por ciento más de militares por todo el territorio de nuestro vapuleado país, comparado con el sexenio de Peña Nieto.
Son 71 mil 822 soldados desplegados por el tabasqueño cuando en sus tiempos de opositor reprobaba las acciones emprendidas por los “neoliberales”. Con Calderón patrullaron las calles 52 mil 690, mientras que con Peña Nieto fueron 54 mil 980 elementos.
Pese a las acciones de López Obrador, (todas fallidas) los crímenes siguen a la alza ya que en 21 meses de su gestión, los homicidios dolosos suman 48 mil 909; con Enrique Peña fueron 29 mil 063 ciudadanos y con Felipe Calderón 18 mil, 452 víctimas.
Son datos duros que demuestran que López Obrador no ha dado resultados positivos a lo largo de su gestión muriéndose los mexicanos por covid-19, niños con cáncer por falta de medicamentos, a manos del crimen organizado, mientras el tabasqueño sigue sumergido en sus frívolas giras de trabajo recaudar votos para 2021 y echando culpas del desastroso país que le dejaron los anteriores mandatarios.
La realidad es que este sexenio ya está perdido, el de la cuarta transformación. Pero viene lo peor, cuando nos incorporemos los más de 125 millones de mexicanos a la nueva normalidad, por la falta de inversiones de empresarios tanto nacionales como extranjeros, recuperación de los millones de empleos perdidos por el masivo de ciento de miles de empresas que cerraron sus puertas por falta de apoyo gubernamental al no firmar acuerdos.
Ya veremos a quiénes culpará una vez más Andrés Manuel López Obrador de sus desaciertos, de su irresponsabilidad, de su falta de liderazgo y de sus múltiples yerros.
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